Tengo 30, manchega de nacimiento, madrileña de adopción pero mujer sin bandera que solo busca patrias debajo de la piel.

Me gradué en Diseño Gráfico por la Escuela Superior de Diseño de Madrid. Esa fue la mejor decisión que tomé en mi vida. Ser fiel a mí misma, a mis inquietudes y principios, más allá de clichés, prejuicios e imposibles. Desde siempre soñé con poder dedicarme en el futuro al arte y, aunque años de pasión después aún tenía muchas dudas sobre cómo hacerlo, la imagen, como cuando alguien repara por primera vez en algo que llevaba ahí desde siempre y sin embargo permanecía oculto, comenzó a iluminarse cuando estudié y profundicé en esta disciplina.

Hace algo más de ocho años, se me planteó el reto de diseñar e ilustrar mi primer libro. Fue con “Mi chica Revolucionaria” con lo que empezó esta maravillosa locura: unas 70 portadas para libros, una marca, una voz propia con la que reconocer mi trabajo y que tanta satisfacción me ha dado. Frida Ediciones fue el comienzo de todo. Luego vinieron otros sellos editoriales (Planeta, Penguin Random House, sellos independientes, y otros proyectos maravillosos. También otras disciplinas como el diseño interactivo, experiencias de usuario o diseño de aplicaciones; trabajé como UX & UI designer en la conocida marca tecnológica española Bq y en otras startups, otro mundo emocionante y al que estaré eternamente agradecida por haberme dado tanto, una visión enriquecida, especialmente, del mundo del libro como arte y experiencia.

Me considero una persona versátil, creativa y con empatía artística a la hora de conceptualizar y plasmar una idea pero, sobre todo, de un modo reivindicativo profesional artesanal, me apasiona mi trabajo, explorar hasta el máximo el límite de la transcodificación artística que supone el paso de un concepto, una sensación, una emoción o a veces una mezcla de todos ellos, a una imagen y es por esto por lo que soy una perfeccionista en el detalle. Creo en afrontar con ilusión cualquier reto que se me plantee porque sé que solo hay una manera de hacer las cosas: hacerlas con amor y hacerlas bien.

Actualmente estoy cumpliendo un maravilloso sueño. Hace cuatro años nació Copelia Ediciones, un proyecto editorial independiente donde Vic Fernández y yo nos dejamos el alma cada día para ofrecer los mejores títulos unida a una experiencia viva y donde hemos encontrado el verdadero sentido a toda esta locura de hacer libros y crear cultura.
Copelia ocupa gran parte de mi vida profesional pero además también colaboro con otros artistas en otros proyectos multidisciplinares con los que intento saciar mis inquietudes artísticas, plantearme siempre nuevos retos y ser feliz con lo que hago.